El influencer más grande del mundo
Ya no es noticia que en estos días, Cristiano Ronaldo corrió 2 botellitas de Coca-Cola en una conferencia de prensa y dijo “agua, no Coca-Cola”. ¿Qué impacto puede tener que un futbolista reconocido diga eso? Enorme. ¿Y que lo diga la persona que tiene más seguidores en Instagram en el mundo? Inmenso.
CR7 tiene más de 300 millones de seguidores en Instagram, casi toda la población de Estados Unidos, el tercer país con mayor población en el mundo detrás de China e India. Que el influencer más grande del mundo deje ese mensaje, plantea muchas reflexiones: la primera noticia fue la caída en bolsa de Coca-Cola del 1,6% que luego se le encontró otra explicación a dicha caída. Claramente, parece un mensaje que afecta negativamente a Coca-Cola, pero por otro lado, ¿termina resultando positivo para la marca que hayan hablado tanto de ella en redes sociales? ¿Influye que Messi sea la cara de Pepsi? No creo. Un día después, Paul Pogba, jugador del Manchester United y de la Selección Francesa, realizó lo mismo pero con una botellita de Heineken. ¿Habrá influido en las ventas de la marca? ¿Lo hubiese hecho si CR7 no lo hacía el día anterior? ¿Lo empezarán a hacer el resto de los jugadores que no coincidan con la marca que indirectamente se lo asocia a ellos, en una conferencia de prensa?
Lo que sabemos es que en estos tiempos, una mini acción que realice desde CR7 hasta un microinfluencer que tenga 10.000 seguidores afecta positiva o negativamente en todos nosotros y es uno de los grandes motores de comunicación por los que las marcas luchan.
Alejandro Rajman